Mañana sábado, 3 de noviembre, saldrá desde Mallorca la Comisión de Urología de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de las Islas Baleares hacia los Campamentos de Refugiados Saharauis de Argelia, para cumplir un completo programa de visitas e intervenciones quirúrgicas.

El Proyecto Asistencial urológico de atención Médico-Quirúrgica para la población saharaui refugiada se desarrolla en los campamentos desde hace 28 años con personal sanitario de las Islas Baleares gracias a un convenio entre el IB-Salut y la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui.

En la edición de este año, el equipo humano de la Comisión está formado por 3 médicos urólogos, 2 médicos anestesistas, 5 enfermeras y 1 técnico en electromedicina. De este equipo, dos personas están jubiladas, dos son trabajadores del Hospital Son Llàtzer, cinco del Hospital Son Espases, una del Hospital de Inca y uno de la empresa IBERMAN.

Todas las consultas y posteriores intervenciones se realizarán a pacientes previamente diagnosticados por el Dr. Moulay Mustafa Yumani, único urólogo que hay en los campamentos de refugiados para una población de más de 173.000 personas.

El equipo de Mallorca se encarga además de las consultas e intervenciones, de revisar -y reparar si es necesario- los aparatos de electromedicina con alguna avería.

Asimismo, parte de la formación continuada del personal sanitario saharaui es tarea de la Comisión, que a la vez aprende del personal residente.

Este proyecto -que se desarrolla desde 1990 bajo la coordinación del Dr. Joan Antoni Pascual- cuenta con la financiación de la Dirección de Cooperación de la CAIB y desde el 2002 con el apoyo del IB-Salut a través de un convenio de colaboración que resulta esencial para la continuidad del proyecto.

Gracias a estos y otros colaboradores puntuales como son: Air Europa, la Asociación de Urólogos de Comarcas de Cataluña, laboratorios Gebro Pharma, Mölnlycke Health Care SL y Werfen entre otros, se podrá ofrecer una atención sanitaria especializada a una población que vive refugiada en el desierto de Argelia desde 1976 y, que sigue resistiendo para poder celebrar, esperamos que pronto, el tan ansiado referéndum de autodeterminación, un derecho reconocido por las Naciones Unidas en múltiples resoluciones.