Ya están aquí con nosotros los pequeños embajadores del pueblo saharaui del programa Vacaciones en Paz 2019, que este año cumple 40 años.
El pasado sábado, día 29 de junio, en la madrugada han llegado al aeropuerto de Palma con un vuelo charter de la compañía Air Algerie, 90 niños y niñas saharauis procedentes de los campamentos de refugiados de Tinduf (Argelia).
73 de los 90 niños han quedado en Mallorca, mientras que 12 son acogidos por familias en Ibiza y 5 en Menorca.
Después de pasar el control de Policía Nacional con el pasaporte colectivo con el que viajaba el grupo de niños, se les ha dirigido a la sexta planta donde miembros de la asociación los esperaban para darles la bienvenida y organizarlos para que las familias los recogieran ordenadamente.
A partir de las 5.30h de la madrugada los responsables de los grupos de familias han empezado a llamar a las familias para que se dirijan al aeropuerto a buscar a su hijo asignado.
A las 6 llegaban ya las primeras familias que se han reencontrado con emoción, en el caso de los niños que ya habían venido otros años y con ilusión con los niños que venían por primera vez. A las 8 de la mañana todos los niños ya estaban con sus familias correspondientes.
La operación de llegada ha sido un éxito gracias a la colaboración y apoyo del personal del aeropuerto, de AENA, de la Policía Nacional, que año tras año nos han facilitado en todo momento nuestra labor.
Aprovechamos la ocasión para informaros que el próximo sábado 13 de julio, hemos organizado una fiesta de bienvenida para los niños de Vacaciones en Paz, en el Parque de su Rectoría de Binissalem, que comenzará a las 18:30. A las 20h está previsto el parlamento de las autoridades.
Un verano más estos pequeños embajadores del pueblo saharaui gracias a sus familias de acogida que las cuidará con un hijo más, disfrutarán de unas vacaciones fuera de las altas temperaturas de los campamentos y de las carencias que sufren ellos y sus familias, pasarán una revisión médica y conocerán otro cultura.
Nuestra asociación puede llevar adelante este proyecto gracias a una subvención del Gobierno Balear y del Ayuntamiento de Palma y el apoyo de muchos de municipios, empresas colaboradoras y voluntarios y voluntarias del AAPSIB.